✨ Si comenzara esta historia de amor y sanación, ¿cómo la empezaría? con una frase que me dije hace un tiempo: «Enamórate de ti, de tu mundo y luego de quién quieras»✨
Les compartí en otro post, que les dejo por aquí, como ir a estudiar inglés a Irlanda con la visa de estudiante. Hoy les contaré otra parte de esta historia.
🌈 Me he enamorado de este bello país, de su cultura, gente y paisajes. Ha sido una parte importante de mi transformación y de la historia que he ido compartiendo en mi blog.
Si hoy miro hacia atrás creo que todo es perfecto como es. Cuando salí de mi zona de confort no tenía ni idea que haría y lo mucho que yo cambiaría. Todas las personas que aparecieron incluso antes del viaje fueron necesarias en esta parte de mi camino, sin ellas no sería quién soy.
En el 2015 comencé a escucharme como nunca antes con el yoga, sin embargo en la Isla esmeralda me encontré de otra forma, fue el empujón que necesitaba para salir y mostrar a esa versión de mí que no conocía por completo, de la que varios se reían y les daba lo mismo sinceramente.
En Chile había comenzado a dejar ir cosas materiales, pero en Irlanda fue mucho más profundo porque comencé a dejar ir relaciones de todo tipo. Algunas de ellas eran más cortas, ya que cada semana varios compañeros terminaban de estudiar y volvían a sus países, por lo que decir adiós era una costumbre. Esto hizo que estuviese más en el presente, disfrutar el momento era fundamental. También tuve que aprender a soltar relaciones que tenía en Chile y varias de éstas no sobrevivieron cuando volví a mi país.
Algo seguro es el cambio y todos cambiamos día a día. Por lo que agradezco a todas esas personas que llegaron a colocarle sazón a mi vida. Cuando les recuerdo me pongo a reír, fueron bonitos momentos.
En la Isla esmeralda comencé a conocerme en un nuevo entorno y como no sabía nada de inglés, aprender a comunicarme y a hablar un nuevo idioma desde cero, fue estresante y entretenido.
Bonito viaje donde volví a conectar con los ciclos de la naturaleza y sus cambios (el clima es muy cambiante por lo que puedes tener las cuatro estaciones en un día). Al estar tan conectada con la naturaleza aprendí a andar más lento y ser una observadora de mi vida.
Reconecté con esa parte sociable y extrovertida que había dejado en el pasado y de a poco comencé a recordarla, dejando los pies en la calle y en la pista. Caminando y bailando muchísimo, volvió la persona conversadora que hablaba con todos, (o trataba de hacerlo porque mi inglés no era muy bueno, jajaja) por lo que al inicio el baile fue otra forma de comunicarme.
Volví a conectar con la Karen curiosa y la más risueña, la que le gusta probar cosas nuevas y le gusta preguntarse los porqué. Comencé a pensar que hacer masajes, que había sido mi hobby gran parte de mi vida, podría ser un trabajo como lo estaba haciendo en Irlanda.
Definitivamente vivir allá cambió mi vida. En ese año y medio de compartir sonrisas, bailes, comidas, conversaciones en el idioma que sea y anécdotas 😅 fueron un regalo que atesoro con mucho cariño.
Afortunada y agradecida🙏🌈.
Thank you so much for everything and Sláinte (Slonja).
Les dejo por aquí un extracto de la naturaleza que hay por doquier
Si les gustaría que les contará algo más sobre este viaje, me cuentan. Estaré encantada de apoyarles. Me pueden preguntar por aquí o en Instagram
Les mando un abrazo gigante y espero que tengan un lindo día.
Otros links que complementan esta historia:
- Post visa de estudiante
- Post cuando te recuerdo
- Post libro la magia del orden
- Post mi camino con el yoga